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¿QUÉ ES LA AMIGDALITIS?

La mayoría de las personas han padecido un episodio de amigdalitis alguna vez en su vida, pero esto no necesariamente quiere decir las bacterias son culpables o que siempre se deban tomar antibióticos




¿Qué es la Amigdalitis?



El término amigdalitis se refiere específicamente a la inflamación en las amígdalas palatinas, comúnmente llamadas anginas, aunque esta inflamación puede extenderse a otras áreas como las adenoides o las amígdalas linguales, que son tejido similar a las anginas pero que se encuentra al fondo de la nariz o en la parte más posterior de la lengua, respectivamente.

La amigdalitis pueden ser agudas, crónicas, recurrentes o repetitivas e incluso pueden llegar a complicarse en forma abscesos alrededor de las anginas que se conocen como abscesos periamigdalinos.

Prácticamente todos ya sean niños o adultos pueden padecer al menos un cuadro de amigdalitis, aunque gracias a los avances en los tratamientos, las complicaciones son actualmente muy raras.





¿Cuáles son sus causas?




La amigdalitis es más común en niños aunque es rara antes de los 2 años de edad, las infecciones debidas a bacterias son más comunes entre 5 y 15 años de edad, y en los más pequeños son más comunes las infecciones por virus.

Las bacterias que afectan a las anginas son principalmente especies del grupo de Estreptococos y son responsables del 15 al 30% de los casos, siendo los más serios los debidos a estreptococos del grupo A.

Sin embargo, la mayoría de los casos son causados por virus, como los adenovirus, virus herpes simple, citomegalovirus, virus Epstein-Barr.






¿Cómo diferenciar los tipos de amigdalitis?




Como se ha mencionado las infecciones de anginas pueden separarse en causadas por virus o por bacterias, pero también pueden diferenciarse por su tiempo de evolución y las molestias que ocasionan.



Amigdalitis aguda:

Se presenta como fiebre, dolor de garganta, mal aliento, dolor y/o dificultad para pasar comida o líquidos, presencia de ganglios dolorosos en el cuello, malestar general y cansancio. Si el tamaño de las anginas aumenta considerablemente por la inflamación se pueden presentar dificultad para respirar, necesidad de respirar con la boca abierta, periodos durante el sueño en donde se deja de respirar (apneas).

Habitualmente se resuelve en 3 o 4 dias aunque algunos casos pueden llegar a semanas aún a pesar de tratamiento.


Amigdalitis recurrente:

Se considera recurrente cuando se presentan varios episodios en un año, pueden ser más de 3 en el último año, más de 5 en los últimos dos años o más de .

Amigdalitis crónica:

Se caracteriza por mal aliento, dolor de garganta, inflamación de las anginas y crecimiento crónicos de ganglios en el cuello.

Absceso periamigdalino:

Es una complicación que aún se presenta, es más común en adultos jóvenes pero puede presentarse también en niños. Se manifiesta con dolor intenso de garganta, cambios en la voz (voz apagada o de papa caliente, es decir como si la persona hablara mientras tiene una papa caliente en la boca), fiebre, mal aliento, dificultad para abrir la boca y exceso de salivación. Esto representa una urgencia y debe buscarse atención médica de inmediato.




¿Cuál es su tratamiento?



Lo más importante es mantenerse hidratado y pueden indicarse medicamentos para controlar el dolor; como se mencionó al principio del artículo NO TODOS LOS CASOS REQUIEREN ANTIBIÓTICOS, estos se usan solo en casos de infección por bacterias y esta decisión también depende de la severidad de cada cuadro.

En casos severos, cuando se presenta un absceso o la inflamación de las anginas provoca obstrucción de la vía aérea, es necesario el manejo dentro de un hospital con medicamentos por vía intravenosa y vigilancia; en el caso de abscesos también se debe valorar la necesidad de drenaje en quirófano.

Los casos de amigdalitis crónicas o recurrentes deben ser valorados por el especialista, para que este determine cuál es el manejo más adecuado. En ocasiones puede ser recomendada la extracción de las anginas mediante cirugía (amigdalectomía).



Es importante siempre acudir a valoración por el médico en caso de presentar molestias, ya que el tratamiento adecuado previene posibles complicaciones que de no ser identificadas y manejadas a tiempo pueden volverse fatales.






Si tiene alguna duda o requiere mayor información, puede comunicarse al correo clinica.otorrinos@gmail.com

Puede solicitar una valoración a los teléfonos 55593857 y 55591409









FUENTES: 

Pediatric Tonsillectomy, Oomen, Modi, Stewart; Otolaryngology Clinics North America, 45 (2012): 1071-1081

American Academy of Otolaryngology-Head and Neck Surgery. Patient Health. TMJ
Diagnóstico y Tratamiento en Otorrinolaringología, Cirugía de Cabeza y Cuello, 2da ed, Anil K. Lalwani MD. McGraw Hill

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